Una de las mayores dudas con las que se encuentran los familiares en centros residenciales se plantea en el momento de comenzar a usar sujeciones mecánicas. Para comprender mejor qué son y disminuir el nivel de ansiedad cuando se plantea su uso, aquí os dejo algunas cosas interesantes que debéis conocer sobre ellas. Espero que os sean útiles. Las sujeciones mecánicas son métodos manuales, aparatos o materiales físicos que se ajustan al cuerpo del residente y del que no pueden deshacerse con facilidad, limitando su libertad de movimientos. Están indicadas para las siguientes situaciones, entre otras, aunque siempre que puedan ser controladas de otra forma se pautarán como última opción cuando todo lo demás no de resultado:
a) Cuando existe agitación que no puede controlarse con medicamentos tanto motora como conductual.
b) Para cuadros confusionales agudos.
c) Ponen en riesgo su propia integridad física al negarse a realizar actividades básicas como comer o dormir.
d) Conductas anómalas como la coprofagia o las autoagresiones.
e) Alto riesgo de traumatismo como antecedentes de caídas de repetición o en pacientes con déficit en la estabilidad y control corporal.
f) En pacientes que requieran de facilitación de tratamiento y requieran inmovilización de algún segmento corporal para la colocación de sondas nasogástricas, vías venosas, etc.
Siempre debe pautarlas el departamento médico quién junto con el terapeuta ocupacional decidirá cuál es la más adecuada en cada caso existiendo varios tipos:
1. Barandillas a ambos lado de la cama o a uno sólo que impiden levantarse evitando las caídas innecesarias.
2. Contención de tronco, extremidades, tanto en silla como en cama, que le impida levantarse de la silla o de la cama, manipular su propio cuerpo. Dentro de éstas tenemos:
a.Cinturón abdominal a silla, para aquellas personas que tienen control de tronco evitando que el usuario caiga hacia delante.
b. Cinturón abdominal – perineal, para las personas que tienen cierto control de tronco, evitando que resbale de la silla.
c. Cinturón de cama, sujetando al usuario por el abdomen y permitiendo movimientos de brazos y piernas así como el girarse hacia los lados o sentarse en la cama.
d. Chaleco torácico abdominal, en pacientes con menor control de tronco y en los que queremos evitar que caigan hacia delante.
e.Chaleco torácico- perineal igual que en caso anterior para usuarios sin apenas control de tronco y con riesgos de resbalarse.
f.Muñequeras
g.Manoplas
Como veis todas son acolchadas y no suponen ningún riesgo para el paciente. De cualquier forma, si todavía tenéis dudas podéis dirigiros a terapeuta ocupacional de vuestro centro quien estará encantado de ayudaros.
